La mentira contamina

Ayer fui a ver una peli "Perfectos Desconocidos". Me reí mucho. Y a parte de reír, me hizo pensar. Me hizo pensar sobre el recurso a la mentira y sus consecuencias. Me hizo pensar en todas las mentiras que conozco dentro de las parejas y de las familias. 

¿Merece la pena una mentira? Yo pienso que no. Ahora bien, seguro que una persona tiene uno o más motivos para faltar a la verdad. Y por supuesto, el motivo no tiene porque ser hacer daño, mas bien puede ser lo contrario, proteger. Ahí encontramos a las famosas mentiras piadosas, aquellas que supuestamente se cuentan para proteger. 

Versión galega

En muchas ocasiones podemos pensar que una mentira piadosa es buena, podemos pensar que la verdad le causará dolor al receptor y decidimos ocultar parte de la verdad y contar esa mentira piadosa… para proteger. Yo siempre me pregunto a quien protegen realmente las mentiras. Pues realmente, dudo que con la mentira se pueda proteger a alguien, puede que inicialmente durante unos instantes, pero imposible en la totalidad de la vida. 

Cuando hay una mentira, esa mentira puede contaminarlo todo, incluso hechos que sucedieron hace más de 10 años y sobre los que no existió ningún ápice de duda. ¿Por qué cuestionarnos algo que ocurrió hace 10 años y que nos pareció de lo más normal? Porque descubrimos que después de todo el vivido, una persona en la que depositamos, en un momento de nuestras vidas, toda nuestra confianza, nos mintió. Y entonces puede entrarnos la duda de si nos mintió desde siempre. 

Puede que sólo haya mentido una sola vez. Puede que la mentira haya versado sobre un período anterior o posterior a la relación que mantuvimos con esa persona, sea de pareja o de amistad…. Fuese como fuese, es una mentira. ¿Y sólo una mentira es suficiente para borrar toda la confianza? ¿sólo una mentira es suficiente para cuestionarnos toda la vida compartida con una persona? 

Para mí la respuesta es afirmativa. Podemos llegar a cuestionarnos todo. Podemos llegar a cuestionar aspectos que nunca antes nos habíamos cuestionado en relación a esa persona. ¿Por qué? Pues porque la mentira contamina. Todo. Sin fin. 

La peli “Perfectos Desconocidos” nos muestran mentiras y situaciones que parecen increíbles, si bien es cierto el dicho que la realidad supera la ficción. Y para muestra, un par de botones.

Con esta película, me acordé de ese ex-compañero de trabajo que con 40 años de edad llevaba más de 20 años  con su pareja- estoy de acuerdo, todo un récord en los tiempos que corren-. Pues él se mostraba siempre como un colegial enamorado, mandaba flores todos los meses a su mujer, acudía junto con sus hijos religiosamente todos los sábados a misa y… aprovechaba toda cena o viaje de trabajo para liarse con cualquiera ser moviente que estuviese disponible. Y cuando digo cualquiera, me refiero a cualquiera, pues ni la falta de higiene personal le hacía recular. 

Con esta peli, también me acordé del caso de otro magnífico profesional de la seguridad, y dicho sea de paso, de esto de las mentiras. Este se moría por casarse y terminó casándose. Y a la novia que tenía antes de conocer a quien se convertiría en su esposa, la mantuvo. Así que este hombre tiene una esposa en Castilla-La Mancha y una novia en Castilla-León. Cuando le preguntan donde está su mujer, responde sin problema, en Castilla. 

A mí la mentira no me gusta, me hace daño, por muy buenas intenciones que tenga quien la dice. Yo soy de las personas que prefieren una verdad desnuda a una mentira con rositas. La honestidad es un valor que hace grande a una persona. 

Reitero, con una sola mentira podemos llegar a cuestionarnos todo. ¿Por qué? Pues porque la mentira contamina.

Y tú, ¿también le tienes aversión a las mentiras o defiendes las mentiras piadosas?