Buena esperanza


Sigo sentada

Llevo más de cuatro horas en este sofá gris, en esta casa pequeña, en este día lluvioso de primavera, en el que parece que el cielo se va a caer encima de esta silenciosa ciudad.

Siento frío.


Hasta en 4 ocasiones, en los 7 últimos días, llamé a la empresa que suministra el gasóleo de la calefacción de todo el edificio y en las 4 ocasiones, me dijeron que tardarían un máximo de 2 días en servirlo.

Otro ejemplo de eficacia.

Me pregunto cómo es posible que esas empresas ganen dinero con el servicio deficiente que prestan, mientras profesionales responsables y eficaces, como mi novio autónomo, ganan una miseria y los fríen a impuestos.

Será el capitalismo.

Taller de escritura. Confinamiento. Abril 2020

Comentarios

Entradas populares de este blog

3. Verbalizar las emociones

Sentimientos enfrontados

Un miedo ancestral. El abandono ante el embarazo