Responsabilidad. Cuando 1 más 1 suman más de 2
La responsabilidad es la "response ability". La responsabilidad es la capacidad de dar respuesta. Es la
capacidad de dar soluciones. En atención a esta definición, ¿Quién es
responsable? ¿Quién es quien de dar respuesta ante diferentes situaciones? Yo
quiero responder.. Yo, yo lo soy. Yo soy responsable.
Hay personas que no quieren ninguna
responsabilidad. Yo tampoco quise siempre tener responsabilidades. No quería
tener que ser siempre responsable… hasta que aprendí que ser responsable es ser
capaz de vivir mejor.
Esas personas que no queríamos responsabilidades, ¿somos personas irresponsables? ¿o inmaduras? ¿o incapaces?
Puede que esas
personas que no queríamos responsabilidades simplemente aún no teníamos desarrollada la capacidad de dar respuesta a las diferentes situaciones que la vida nos presentaba en un determinado momento. Puede que no supiésemos responder de otro modo. Por supuesto, esto no significa que en otro momento de la vida no
seamos capaces de dar una respuesta satisfactoria para nosotros mismos ante esas mismas
situaciones. Eso es lo magnífico del crecimiento de las personas.
Dije antes que elijo ser una persona responsable. Ahora bien, es cierto que no me gustar ser la única responsable. Prefiero disfrutar de la responsabilidad en compañía. Ahí cuando 1 más 1 suman más de 2. Cuando la acción de 2 personas responsables con el mismo foco da un resultado mayor que la suma de sus acciones individualmente consideradas. Esto es, cuando el trabajo en equipo o en pareja es mucho más que la suma de su trabajo individual.
El hecho de estar en pareja y sentir la
responsabilidad únicamente en tu propia espalda, es agotador. Agotador y un signo
de que la pareja no está en su mejor momento.
En una época en la que tuve una larga lista de responsabilidades, o dicho de otro modo, un montón de
situaciones a las que dar respuesta, dí las respuestas. Y aunque estaba
acompañada, las respuestas las di yo sola. O al menos tenía la sensación que las daba yo
sola.
Para mí fue una carga difícil de soportar. Y también fue un claro
indicativo de que la pareja estaba en uno de esos momentos decisivos. En uno
de esos momentos en los que o se superaba y se reforzaba la pareja o se rompía
definitivamente. Sin vuelta atrás. Hacia delante.
Resolver este tipo de
situaciones también es cuestión de responsabilidad. De la capacidad de dar
respuesta como mujer. De la capacidad de dar respuesta como hombre.
Este post
quiso haber sido escrito hace 17 meses. Y hace 17 meses aún no existía este blog. Y
por fin, este post ha sido escrito. Eso sí, tuvo que esperar a que se escribiesen y se publicasen más de 20 posts. Hace 17 meses, yo ya llevaba casi 6 años escribiendo. Escribía y nunca pensé en publicar lo que escribía. Ese domingo de noviembre sólo
pensaba en publicar este post. La responsabilidad, cuando 1 más 1 suman más de
2.
La espera mereció la pena.
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