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Mostrando entradas de marzo, 2017

8. Compartir tiempo con los amigos

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Quien tiene un amigo tiene un tesoro, reza el refrán popular. Por lo tanto, creo firmemente que uno de los pasos para recuperarnos con éxito de una ruptura es compartir tiempo con nuestra gente : con la familia y con los amigos. Hay quien afirma que en las rupturas, como uno de los momentos difíciles de la vida, descubrimos quién son los verdaderos amigos. Afortunados aquellos que, como nosotros, cultivan diariamente la amistad y disfrutan de un ejército de amigos. Un amigo de verdad los va a escuchar las veces  que haga falta . Ahora bien, si tenemos la suerte de contar con un grupo de amigos a mí me parece interesante quedar con ellos individualmente, y así poder verbalizar las emociones con personas diferentes, poder ser escuchada en múltiples ocasiones y poder profundizar también en los sentimientos que tu propia ruptura provoca nos tus amigos y en los que ellos sintieron en situaciones similares y en cómo se sienten en general en su vida. Compartir tiempo con los...

7. Llorar, reír y sonreír

A punto de finalizar esta fría estación de invierno, siento quizás más ganas de escribir sobre el amor, el desamor y cómo afrontar las rupturas. Será que la primavera está llamando a la puerta? En los días posteriores a una ruptura podemos sentir ganas de llorar – siempre y cuando no hayamos llorado ríos y mares antes de la separación y tengamos el dique seco;). Si sientes ganas de llorar, hazlo, exprésate, libérate,   el llanto es liberador . Y mucho más liberador es   reír después de haber llorado . La   sonrisa   moviliza multitud de músculos faciales y es un gesto poderosísimo. Qué es lo que no consigue una sonrisa? Y la   risa   moviliza multitud de músculos en general. Tanto la sonrisa como la risa cambian la emoción, la transforman. Sonreír.-   Así que si se nos “ha olvidado cómo sonreír", si nos cuesta sonreír o si no somos capaces de hacerlo, recordemos el   ejercicio de SONREÍR . Descuida, nadie va a tomarnos una fot...

6. Cambiar las emociones pensando en positivo

En un  post anterior,   escribí sobre una de las 2 maneras de cambiar la emoción , por un lado con el movimiento, por otro lado, con el pensamiento. El pensamiento cambia la emoción. Si tenemos pensamientos negativos iremos hacia estados emocionales negativos, si por el contrario tenemos pensamientos positivos iremos hacia estados emocionales positivos. Si cuando estamos desolados o tristes somos capaces de llevar nuestra mente a pensamientos e imágenes que nos gustan, que son positivos... crearemos una nueva emoción y seremos capaces de convertir la tristeza en felicidad y la decepción en esperanza. Veámoslo con un ejemplo, si pienso que ya no estoy compartiendo la vida con mi  pareja, me siento triste. Si pienso en las oportunidades que se me abren de compartir mi vida con una persona que sea más acorde con mi estilo de vida, puedo crear un sentimiento de esperanza, y por lo tanto sentir una cierta felicidad. Qué nos puede ayudar a crear pensamiento...

5. Con la cabeza erguida

Tras escribir el último post " Cambiar las emociones con el movimiento " me di cuenta de un aspecto importante, que me ayudó mucho a superar una separación sentimental, y sobre el que no escribí. Y me ayudó no sólo tras una ruptura, sino en general a sentirme contenta en la vida. Y qué es esto? Seguro que a todos nos suena la expresión de que la   actitud en la vida es importante . Pues la   postura corporal   también lo es, así que prestemos atención a nuestro cuerpo cuando nos movamos.    Recuerdas el   ejercicio de sonreír ? Pues el   ejercicio   que propongo hoy también es un ejercicio constante. Bien, ponte de pie, pon la espalda recta, los hombros hacia atrás, la cabeza erguida, la mirada al frente y la sonrisa en la cara. Sí? Ahora a caminar, a movernos.  Notas en ti la diferencia  de esta postura? Si caminamos o si hacemos cualquier actividad física y   adoptamos una buena postura corporal , nuestro estado ...

4. Cambiar las emociones con el movimiento

De vuelta en la casa, después de un de un productivo viaje de trabajo y después de una montaña de mails y tareas pendientes en la oficina, aquí estoy de nuevo delante de la pantalla continuando a escribir sobre   el amor, el desamor y las rupturas . En la publicación anterior hablábamos de   verbalizar las emociones , de poner nombre a lo que estamos sintiendo.  Tras una ruptura, los sentimientos suelen ser “negativos” (la tristeza, la rabia, la pena, la decepción...). Una vez que hemos identificado el sentimiento y que somos conscientes de porqué lo estamos sintiendo, llega el paso de avanzar en la gestión de esa emoción. Cómo?   Transformándola . Hacer uno “swap”,   pasar de una emoción “negativa” a otra “positiva” , como por ejemplo, pasar de la tristeza a la un estado más alegre. Pero cómo puedo cambiar esta tristeza que siento? Te estarás preguntando. La respuesta es sencilla -la acción ya es otro cantar, y depende sólo de ti-. Podemos cambiar ...